Sistemas de frenos

Las balatas de freno se forman de dos componentes principales, la placa ó zapata y el material de fricción. Convierten la energía cinética del vehículo en energía térmica mediante la fricción que se produce entre su superficie y la superficie de fricción de los rotores. Cuando el pedal del freno es aplicado, las balatas alojadas dentro de la mordaza o cáliper oprimen el rotor que está sujeto a la rueda para detener el vehículo. Cuando se aplican los frenos, el peso del vehículo se transfiere hacia el eje delantero. Esta transferencia de peso requiere que esté disponible mayor potencia de frenado en las ruedas delanteras y menor potencia en las ruedas traseras para evitar el bloqueo del eje trasero.

Utilizados en los frenos de tambor que sirven para transferir la fuerza generada por el pulmón de freno a las dos zapatas, mediante una palanca. Para ello, en el lado del accionamiento del árbol de leva hay instalado un engranaje (para el alojamiento de la palanca de freno) y en el lado de salida una leva en S (para la inclinación de las zapatas). Al accionar el eje de leva, se presionan las zapatas contra el tambor y la rueda se desacelera o se detiene.

Enlace entre el actuador (cámara) y el eje de levas del freno (gavilán). Transforma y multiplica la fuerza generada por el vástago de la cámara en energía radial que aplica sobre el eje después de la leva. Los modelos de tensor de ajuste manual están determinados con el número que representan el máximo de torque (por ejemplo, una unidad del tipo 20 está capacitada para un máximo de 20,000 libras/pulgadas de torque). Los tensores de ajuste manual de pueden conseguir en varias configuraciones de brazo, longitudes y tipos de lengüeta.

Dispositivo utilizado en vehículos que hace variar la fuerza de frenado para evitar que los neumáticos pierdan la adherencia con el suelo.